'Voces del Chaco' Photography Exhibition Gallery
Voces del Chaco: Pertenencia y Auto-Representación
El Gran Chaco es el segundo pulmón verde más importante de Sudamérica después de la Amazonía. Es una zona de tierras bajas cálidas y semiáridas, con presencia en Argentina, Bolivia, Brasil y Paraguay, que posee una gran biodiversidad y reune más de 3.400 especies de plantas y 500 animales. Esta región ha registrado en las últimas décadas una de las tasas de deforestación más altas del planeta, donde grandes emprendimientos agrícolas y ganaderos han ido sustituyendo los bosques naturales. La emergencia climática ha acelerado su degradación, planteando una serie de desafíos para gobiernos y comunidades locales. Se estima que en el Gran Chaco habitan alrededor de 9 millones de personas, siendo un importante porcentaje de comunidades indígenas (UN, 2022), que, a lo largo de su historia, han sido las más afectadas de diversas maneras por el impacto del colonialismo y el extractivismo, llevando a la deforestación, desposesión de tierras y transformación de prácticas culturales. Es así que, los ayoreo totobiegosode, el único pueblo originario americano que vive en aislamiento voluntario fuera de la Amazonía, se ha convertido en forzado guardián contra la deforestación del Gran Chaco.
"‘Voces del Chaco’ busca visibilizar las perspectivas humanas locales del Chaco boliviano, brindando un espacio de auto- representación para quienes habitan la región y para la diáspora chaqueña. Los autores de estas fotografías representan una visión local y personal sobre la experiencia de habitar el entorno y de pertenecer a las comunidades chaqueñas.
Profesionales o autodidactas, est@s fotógraf@s expresan su mensaje a través de interesantes capturas que comunican tanto la riqueza natural y cultural de la zona, como las luchas y desafíos a los que se enfrentan sus habitantes en la actualidad.", SDCELAR.
El Centro de Excelencia Santo Domingo para la Investigación sobre Latinoamérica en el Museo Británico (SDCELAR) y sus colaboradores, buscan dar mayor visibilidad a las colecciones latinoamericanas, experimentar con las formas en que se lleva a cabo la investigación y apoyar iniciativas locales de patrimonio cultural.
'Mi Pueblo Itaú' - Vladimir Fernández Avilés
Ganador de la categoría ‘Voces del Chaco’ del concurso fotográfico “Naturaleza, Sociedad y Clima”, seleccionado por el SDCELAR del Museo Británico para participar de un proyecto sobre el Chaco boliviano.
“A través de mi fotografía quisiera dar a conocer el pueblo de mi padre que también lo considero mío, me gustaría que la gente tanto a nivel nacional como internacional pueda conocer a su gente, sus costumbres, su estilo de vida. Quisiera fomentar el turismo en la zona, y dar el primer paso para que tenga más reconocimiento y su población pueda obtener mejor calidad de vida, ya qué no posee un camino adecuado para llegar, carece de los servicios básicos y de una adecuada distribución de recursos”
Alcira Canuto Segundo
Artesana guaraní, Tarija.
“La seguridad alimentaria del pueblo guaraní depende del maíz, la pesca y la artesanía. Años antes el clima era lindo, llovía en tiempo justo y sembrábamos maíz, nuestro río Pilcomayo tenía muchos peces grandes, pero cuando las empresas llegaron a nuestro territorio, el clima cambió, ya no llueve, el rio está contaminado, aparecen enfermedades, la sequía es recurrente, la tierra se erosiona gradualmente. Hace poco hubo un aluvión en nuestra zona, estamos viviendo en situación vulnerable, se viene una crisis para la familia guaraní, la única alternativa que tenemos es nuestra artesanía en palma, la única fuente de ingreso mínimo para solventar nuestra familia y hacer estudiar a nuestros hijos.“
Aldo Cuellar Moreno
Comunidad Palmarito, Santa Cruz
'Se perdió la cosecha' - Alex Pancho Rojas y Lidia Isabel Guarayo
Estudiantes Escuela de Periodismo Indígena de Charagua, Santa Cruz
Cesar Augusto Pizarro
Ornitólogo aficionado, Tarija.
Claribel Villarroel Irala
Bióloga. Chuquisaca.
Las 5 fotos representan 5 áreas protegidas municipales, 5 territorios en resistencia. A través de estas 5 fotografías quiero mostrarles la identidad de cada una de ellas, visibilizar que son territorios ricos, no por sus hidrocarburos o ganadería, sino por su biodiversidad, su riqueza cultural y por la resistencia que aún persiste en las personas locales de defender sus recursos naturales. Son 5 áreas protegidas municipales ubicadas a lo largo de la cuenca alta del río Parapetí, como si se trataría de guardianes, 5 territorios con amenazas en común pero con identidad propia, con "ese algo" que las hace diferentes unas de otras.
Colectivo Museo Artecampo
Asociación de tejedoras “Sumbi Regua” en la region del Isoso
En esta colección de fotos se retrata a las artesanas Guaraní de la Asociación “Sumbi Regua” ubicada en la región del Isoso, Chaco Boliviano. Las tejedoras “Sumbi Regua” son actualmente portadoras y transmisoras del textil isoseño, un lenguaje vivo de la cultura guaraní que actualmente se encuentra fuertemente amenazado debido a la sequía que afecta el cultivo del algodón nativo. Es posible considerar al algodón nativo como punto de partida del ciclo textil, su nombre en guaraní es Mandɨyu que viene de Amandɨ (Agua de lluvia) y yu (amarillo, divino, etc.). La denominación del algodón como “Agua de lluvia divina” nos permite deducir que es una especie de mucho valor para el pueblo guaraní. A la vez, es una especie fuertemente amenazada por la sequía que cada año se encrudece en el Chaco debido al impacto del cambio climático en la región. A partir del arte textil las mujeres Sumbi Regua se conectan con la cosmovisión de sus ancestros. Hasta el día de hoy, sus sueños son un elemento determinante al momento de tejer y las representaciones de los elementos naturales de su entorno como es el maiz (que se puede apreciar en la fotografía) forman parte de los tejidos elaborados con la técnica Moisi. Es así que el entorno natural y la forma de concebir el mundo para el pueblo guaraní está presente en todas las etapas del proceso textil. Las imágenes representan las distintas etapas del ciclo textil y a la vez lo conectan con su entorno, hilando entre sí la estrecha conexión entre la naturaleza y el patrimonio tangible e intangible del pueblo guaraní.
Miembros del Colectivo Museo Artecampo: 1. Asociación de Tejedoras Sumbi Regua-Artecampo La Asociación de Tejedoras Sumbi Regua-Artecampo se formó en 1984 con el apoyo del CIDAC. Las socias pertenecen a la rama de los isoseño-guaraníes. Sus mujeres le dan una nueva vida al tejido tradicional, se recupera la calidad, los antiguos diseños, la dignidad del arte del tejido, se diversifica la producción y se mejoran los telares. Hoy en día, las artesanas elaboran tapices, cojines, hamacas y vokoos (bolsas), desarrollando la técnica y los motivos ancestrales. Cada pieza textil constituye una creación única e irrepetible que expresa el estilo personal de su tejedora. La Asociación de Tejedoras Sumbi Regua-Artecampo cuenta con socias en 10 de las 22 comunidades del Isoso, entre ellas La Brecha, donde tienen su centro de capacitación. (Foto 1) Las tejedoras del Isoso son reconocidas en el mundo Guaraní por la calidad de sus tejidos. La influencia y conocimiento del tejido Chane-Arawak destaca en sus trabajos. Hasta los ochenta, a los Isoseños se los conocía como Chiriguanos, pero el término Chiriguano es rechazado por la comunidad Guaraní, pues hace referencia al mestizaje entre los Chane y Guaraní. El Sumbi, verdadera escritura del pueblo isoseño, revela aspectos de su cultura y su universo mítico a través de códigos simbólicos. El Sumbi hace parte de la espiritualidad de las isoseñas, que dicen “soñar” los diseños: “Me soñé que tenía en mi mano un vokoo y de pronto se convirtió en una víbora grande y tenía sobre sus lomos figuras que yo no había visto, ni había hecho antes. Y esa víbora conversaba conmigo y me enseñaba” —AngélicaIbáñez, tejedora isoseña Existen dos técnicas: el estilo karakarapepo, el más sagrado, de diseños geométricos simbólicos o el estilo moise, más figurativo, con motivos de flora y fauna. (Foto 5) 2. Museo Artecampo Arte Originario y Popular de Tierras Bajas – CIDAC El Museo Artecampo: Arte Originario y Popular de Tierras Bajas desde 2017 comparte en Santa Cruz de la Sierra, Bolivia, la producción artística de indígenas y campesinas, para el reconocimiento de las mujeres y de nuestros territorios; difundiendo la riqueza cultural de Tierras Bajas, conectando los intereses y necesidades de la ciudadanía con expresiones de arte popular y saberes ancestrales. El Museo Artecampo: Arte Originario y Popular de las Tierras Bajas, es un proyecto de CIDAC, soñado por décadas por su fundadora Adita Sotomayor, es un espacio que cuenta con las mejores piezas producidas por Artecampo que fueron y son adquiridas por CIDAC para este fin. Actualmente, 14 asociaciones conforman Artecampo, más de 600 artesanas y artesanos han logrado una importante autonomía en su gestión, contando siempre con el respaldo y asesoramiento del CIDAC. Hoy en día, el museo alberga una colección única, con más de 200 piezas de arte originario y popular, consolidándose como un importante atractivo patrimonial, cultural y turístico en la ciudad. El contenido del Museo se basa en la investigación y experiencia del CIDAC y funciona gracias al apoyo del Gobierno Autónomo Municipal de Santa Cruz de la Sierra. Gracias al trabajo sistemático de 40 años de CIDAC y Artecampo, la programación dinámica del Museo y el nexo privilegiado con las artesanas productoras, el Museo Artecampo está desarrollándose como principal referente de las Artes Originarias y Populares en Bolivia.
Eliamne Karenina Gutiérrez
Bióloga. Charagua, Santa Cruz
Guandare ¿perdida u olvidada?: Pasando el rio Parapetí, en el Bajo Isoso está Guandare, una comunidad pequeña que se resiste a desenterrar las raíces que la mantiene unida al Chaco. Conformada por no más de 15 familias de origen guaraní, se valen del uso de su medio ambiente para sanar, aprender y sobrevivir. Los habitantes de Guandare no solo son las personas, también la fauna y la flora que la rodea, la abraza y le canta cada noche sus más íntimos secretos, como si de un pacto se tratara.
Erico Segovia Castillo
Fotógrafo. Villa Montes, Tarija
Heriberto Paredes Guiramusay
Santa Rosa de Cuevo, Santa Cruz
'Niña en busca de agua' - Iván Arnold
Tarija
'Charagua y las botellas vacias' - Karina Segovia
“Rojos y celestes, blancos y anaranjados, transparentes y oscuros: los envases de plásticos están en todas partes en las comunidades rurales de Charagua y también de algunos barrios de la ciudad. Muchos, la mayoría, están vacíos, listos para ser llenados cuando del grifo salga agua, o cuando los camiones cisterna aparezcan por el horizonte con el líquido que se hace esperar (Texto de Roberto Navia).”
Luis Poggi Montalvo
Camiri, Santa Cruz
“Las voces del Chaco son reflejadas a través de sus costumbres y tradiciones. La cultura guaraní /chaqueña, se arraigó en esta región e hizo de estas tierras su territorio. La fiesta grande o Arete Guazú es la máxima expresión cultural en este pueblo originario, donde el compartir una tutuma de chicha, es sinónimo de agradecimiento al Tumpa (Dios) por la cosecha del maíz. Al sonar la caja, el tambor, la flauta, todos se reunen al medio del patio, agarrados de la mano bailan al son de la música, una danza típica guaraní. Tentayape, que en su idioma significa “la última casa” guarda los restos de una cultura que probablemente de aquí a poco quede solo en los recuerdos.”
Mauricio Vera Sansuste
El maiz “Avati” como base cultural del pueblo guaraní y estabilizador de los suelos por el uso y costumbre en el Chaco. Maíz transgénico: Un secreto a voces en el Chaco es la entrada ilegal de maíz transgénico, justamente por la frontera sur entre el Chaco Boliviano y el Chaco Argentino, el cual amenaza un territorio donde el pueblo sienta sus bases culturales sobre el Maíz “Avati” como el grano dorado, que los ancestros heredaron, para calmar el hambre y agotamiento de los pueblos. El pueblo guaraní este entrelazado con más de 20 variedades de maíz que son cultivadas en el Chaco, de esta semilla, el pueblo guaraní en el Chaco ha sabido utilizarlo para sus diferentes facetas, como alimentación cotidiana, o como un elemento simbólico de hermanamiento y resistencia en sus festividades. Historias contadas alrededor del fuego, datan de muchos años, como el maíz y el pueblo guaraní fueron adaptándose a las tierras calientes del Chaco Boliviano, a pesar de tener inestables épocas por la sequía, el maíz ha sido una semilla resiliente, antes los avatares del clima. La entrada de Maíz transgénico ilegal de las multinacionales, poco a poco avanza silenciosamente, en el Chaco, cambiando el uso de suelos, el cual necesita de AGROTOXICOS, que en una primera fase producirá en demasía, pero ya los efectos de resecamiento de los suelos se verán en el transcurso de los años, provocando contaminación de los acuíferos subterráneos y degradación la tierra. El cambiar el maíz nativo del pueblo guaraní, por uno transgénico, significa una amenaza a la desaparición de una cultura que cultiva para el consumo, por un cultivo agroindustrial que promueve empresas multinacionales, el cual representa deforestación a gran escala. El pueblo guaraní resiste ante el avance del maíz transgénico, en algunas comunidades las mujeres han tomado el liderazgo para el resguardo de las semillas nativas, un legado transmitido por las abuelas de las comunidades, en el cual mediante la chicha (Bebida a base de maíz fermentado) promueven su consumo y realización, para el intercambio y hermanamiento de la comunidad en festividades como el Arete Guazú (Fiesta Grande) una celebración de agradecimiento a la tierra por el tiempo de cosecha del Maíz.
Comunidades Indígenas Guaraníes del Chaco en defensa del AGUA y Territorio: La región del Chaco ha sido un territorio marcado por el sistema extractivista que hasta los días de hoy rige como sistema de desarrollo de energías, el cual solo ha dejado saqueo y pobreza en los pueblos del Chaco y degradación de sus pisos ecológicos. Un caso emblemático por la defensa de los territorios y el agua en el Chaco es el que lideran comunidades guaraníes de Tatarenda y Yumao, el cual se oponen a la construcción de la mega hidroeléctrica Rositas, que amenaza con sepultar bajo 100 metros de agua a su territorio, vulnerando los derechos a la consulta previa y derechos humanos de los pueblos indígenas y áreas protegidas que serian embalsados por la hidroeléctrica en un radio de 45 mil km. Afectando de sobremanera el sistema hídrico del Rio Grande, una de las afluentes mas importantes en el Chaco, en donde los sistemas de agua son muy sensibles. La hidroeléctrica inundaría áreas protegidas con gran diversidad en flora y fauna, además de causar afectación a una diversidad de peces en este rio, el cual es parte de la base alimentaria de estos pueblos. Los efectos, de esta hidroeléctrica financiada con capitales chinos, afectaría la vida de estos pueblos desplazándolos a donde aun nadie sabe, afectado los ecosistemas del Chaco y su diversidad, en ese sentido la organización orgánica de estos pueblos, ha logrado frenar un proyecto ecocida, desencadenando una lucha por el territorio y el agua. La lucha de los pueblos guaraníes, ha llevado al estado y empresas a diferentes juicios, donde las comunidades han estado presentes haciendo la demanda de sus derechos a vivir en su territorio en base a sus usos y costumbres, una lucha que el estado pretende acallar, bajo un discurso falso de preservación a la madre tierra.
'El Puente Clandestino' - Roberto Navia
Periodista
El puente “clandestino” de los menonitas lleva la deforestación a los Bañados de Isoso y amenaza al Parque Nacional Kaa Iya. Santa Cruz.